librerias un mal negocio

Emprender el negocio de una librería es complicado, al menos en México

Abrir cualquier negocio en México es todo un desafío, aunque de los negocios más duros es el de poner una librería independiente, ya que presenta todo un reto complicado sobretodo por el hecho de mantenerla en un país en donde este tipo de locales son cada vez menos.

Tan solo en época de pandemia se estima que en México se fueron a la quiebra 117 librerías tradicionales, quedando en funcionamiento únicamente 198 para todo el país. Tan solo en la ciudad de Barcelona, España existen 6 mil 609 librerías.

Juan Luis Bonilla Rius, propietario de Bonilla Artigas Editores, afirma: “Ni a Hacienda ni a la SEP les interesa este asunto. Existe una ley del libro, pero no la cumplen; el precio único al libro no se respeta y no hay quién imponga sanciones al infractor. Aún existen muchas lagunas jurídicas en el Reglamento”.

Bonilla también considera que el gobierno debería canalizar la producción y distribución de los libros de texto gratuitos a la industria privada, de lo contrario él y el gremio de libreros lo ven como una competencia desleal.

como emprender una librería

Antes de que se fijara un precio único al libro, la competencia con las cadenas generó en el público una idea de que las librerías independientes eran caras, lo que contribuyó a que cientos de ellas cerraran, agrega Bonilla. En lugar de unirse más, los miembros del gremio han optado por dividirse. “Esto es una jungla, cada quien ve por sus intereses, tanto los editores como los libreros”. 

Está desapareciendo

Arturo Ahmed, director general del Instituto de Desarrollo para Libreros (Indeli), afirma que muchos de estos espacios están desapareciendo porque no se adaptan al nuevo mercado y sostiene que la realidad es que los consumidores han cambiado.

Cada vez más establecimientos dedicados a vender libros buscan ofrecer una experiencia, y se apoyan en servicios complementarios como las cafeterías, restaurantes e incluso bares con actividades culturales, para apuntalar sus ganancias.

Alejandro Zenker, dueño del sello El Ermitaño, afirma que “el gobierno no entiende que se trata de un sector de importancia estratégica para el desarrollo del país, que incluso podría aportar mucho más al PIB. En lugar de estar fomentando elefantes blancos como Educal, y erogar sumas millonarias al Conaculta, debería diseñar políticas de emprendimiento cultural que permitan abrir nuevos espacios de lectura. En ese sentido, hemos fracasado como país, ya que no hemos podido incrementar el número de lectores”.

Recuerden visitar el canal de YouTube de El Verbo, así como nuestra excelente biblioteca digital, en donde podrán descargar grandes libros en PDF, totalmente gratis.

Les deseo mucha luz y que en verdad, sean libres.

Gracias y hasta la próxima.